viernes, abril 24, 2009

¡Prueba superada!

Tal y como no me he cansado de anunciar, ayer debutamos en las tablas del teatro Flumen como banda de blues.

Y no puedo dejar de afirmar que , aunque el tema del nombre aún colea, merecemos llamarnos Calamidad o alguna de sus variantes: el baterista estaba en Vitoria por la mañana, no sabíamos cómo llegar al sitio, mi coche daba extrañas señales de avería (que quedaron en nada, afortunadamente), un émulo desafinado de Víctor Jara se empeñaba en no dejar el escenario para la prueba de sonido (me recordaba a aquella canción de la Cabra Mecánica que decía "muy a mi pesar / alguien se me adelantó / y asesinó al último nuevo / cantautor").

Con todo y esto, un grupo tirando a viejuno, con la excepción de la cantante y la pianista (entre las dos suman menos años que los que atesora el batería, por ejemplo); se plantó con un par en el Certamen de Música Joven, esto es, un festival benéfico en el que actuaron con la mejor voluntad y arte chavales de diversos colegios e institutos, grupos musicales de profes, un par de (grandes) percusionistas africanos y bastantes voluntarios, familiares y amigos.

Nosotros no nos escuchábamos en el escenario, pero se pone a todo buena cara y ya está. Que un clavo te deja idem , pues sonrisa. Que te pega un calambrazo la guitarra, risueño total. Que no escuchas ni a la cantante ni a la pianista, a reirse.

Recuerdo que Carlos Pumares, trabajando como locutor de radio en un programa de cine en Antena 3 Radio (antes que tele, fue radio), me despertaba por las noches aullando "Ciudadano Kane!!! Obra Maestra!!!", "No me hagan explicarles de nuevo 2001!!" y cosas así .

Una de sus manías era cuestionarse porqué los músicos ponían algunos amplificadores hacia ellos... "si el público está al otro lado!!!" , chillaba.

Bueno, señor Pumares, hoy, décadas más tarde me encuentro en la facultad de aclararle esta cuestión: porque no nos oímos los unos a los otros. Y eso, ES HORRIBLE!

Pero no quiero que esta entrada de la sensación de que ayer todo fue mal. De hecho, todo fue fenomenal: tenemos un ambiente de trabajo muy bueno, mucha ilusión, la audiencia acabó muy contenta, nos pidieron más, aunque la cruda realidad es que el organizador, dado el montón de actuaciones, no nos dejó hacer un bis, algo comprensible - o no; y tenemos ganas de seguir en esto.

Os esperamos en la próxima.

En mi caso particular, la próxima estación será el mes que viene, con una actuación de lo que era un combo de jazz y ahora es más de black music: mucho funk, distorsiones y caretos de guitar hero, ole!!

miércoles, abril 22, 2009

Mezclaillo

Cada cosa a su tiempo. En este período sin escribir me asusté por un problema cardiaco, pero la cosa parece no estar tan mal como pintaba, por lo que tengo vía libre de nuevo para correr, a lo que me he dedicado con entusiasmo y con agujetas participando en la volta a peu a Malilla (que es un barrio de Valencia, no una ciudad independiente al lado de Ceuta ni nada así).

También se ha reactivado el tema de la banda de blues, que debutará este viernes en un festival organizado por una ONG que trabaja en el Chad, aunque a día de hoy estoy bastante perdido en cuanto a datos sobre el evento este: al menos sé qué temas tocamos y eso ya es bastante.

La polémica del nombre del grupo nos persigue. Por mi parte sugerí nombres a porrillo, con mayor o menor fortuna: Capitán Stubbin, Florah Jones & the Diana Trolls (elaborado), El brazo de Tino (un homenaje a Parchis y a la oreja de Van Gogh), los Calamity Jones (porque somos una calamidad), etc.

EDITADO: Hay un nuevo nombre en la encuesta , se trata de "EnBlues-ados". Google no me deja modificarla, así que si preferís esta bonita denominación, hacedlo en los comentarios de esta entrada, por favó!
Ni idea de cómo nos llamamos. A improvisar se ha dicho.