Como parte de nuestro proyecto de investigación estrella, encerramos a cien individuos en una nave industrial y les proveímos convenientemente con una linterna, un fuet y un vaso de nocilla de cristal.
Cada diez minutos emitíamos un discurso de las Cortes de Finlandia al Azar (especialmente celebrado fue la comparecencia del Ministro de Pesca sobre la polémica del escabechado del salmón). Tras varios días en cautiverio, observamos que, en algunos casos extremos, los individuos analizados podían alcanzar la “nubelosa”.
La nubelosa es un estado de percepción en el que la atención sobre la realidad se dispersa, alcanzando, previo alicatado de las vías adyacentes, el cielo enladrillado en todo nuestro horizonte.
2 comentarios:
Y no se cortó ninguno las venas con el vaso de nocilla??
Era el modelo de plástico, el de garrafón, jejeje
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